Por fin una de Barrio Sésamo!!

Qué ilusión me ha hecho!!! He tenido que fabricar un Epi y un Blas de pasta de azúcar!!! La verdad es que me daban bastante respeto sus chalequitos de rayas, pero ha valido la pena el esfuerzo, qué agradecidos son estos personajes...



Cada vez que me proponen hacer algo nuevo me paso varios días dándole vueltas al diseño, hago varios bocetos, busco muchas imágenes de los protagonistas y termino siempre con el pellizquito en el estómago por si no me quedan lo suficientemente realistas. Es lo que le digo a mi madre: "si no me lo piden no se me pasa por la cabeza hacerlo", pero merece la pena el reto.

También tengo a Elmo y a Coco en la parte de atrás, pero las fotos son un desastre... las hice con un poco de prisa y se han movido, así que os dejo con la vista frontal de esta tarta mitad súper brownie chocolatoso y mitad vainilla con chocolate con leche.


Espero que os guste!!

Un abrazo.

Volvemos con Hello Kitty!!!

Las opciones de tarta para el cumpleaños de Marta eran Dora la exploradora, Minnie o Hello Kitty, y tengo que ser sincera: yo quería Kitty!!!! Además, tenía ese papel de regalo taaaan mono en casa esperando la ocasión (entre tantos otros que tengo acumulados pá cuando me puedan hacer falta, los compro de forma compulsiva...)

No sé qué tiene la gatita pero me tiene cautivá, así que he sido taaaaan feliz haciendo esta tarta que no quería acabarla, jeje.

Aunque Marta cumplía sólo 2 añitos, su cumple era multitudinario! Así que completamos la tarta de vainilla con 3 súper bizcochos de distitos sabores para que hubiera para todos los gustos: canela y limón, frutos del bosque y súper chocolate.

A partir de ahora ofreceré esta opción cuando haya fiestas grandes, o no se tenga muy claro el número de invitados porque, además de ser más económico, es más versátil. Hay mucha gente, sobre todo mayor, que no les gusta el dulzor de las tartas fondant; con estos bizcochos caseros rellenos cada uno de un sabor distinto, podemos tener una gran variedad con la garantía de que están recién hechos y manteniendo el encanto de las recetas más tradicionales.

¿¿Un triatleta comiendo tarta??

Pues claro que sí, hombre, siendo su cumpleaños está en su derecho de celebrarlo y comerse un trozo de tarta, seguro que desde el sábado hasta hoy le ha dado tiempo de quemar las calorías extra, jejeje.

María fue quien me encargó esta tarta para su marido, es clienta repetidora (gracias por volver a confiar en mí!) y un encanto de persona, por eso no me importó que me llamara con tan sólo un día de antelación y se la hice con mucho cariño.

A ella le encanta el bizcocho brownie con mermelada de fresa (y a sus compañeras de trabajo también, que yo lo sé) y repitió sabores para que la probaran su marido y sus amigos.

Felicidades por tus 35 añazos, Ángel! Mucha suerte con el triatlón.

Espero que os guste!

Un abrazo.



Pingüinos en el hielo

He disfrutado como una enana haciendo esta tarta para Guille y su papá, tengo que reconocerlo. Me pasé un buen rato dándole vueltas a los pingüinos encima de la tarta para que me cupieran más, porque, aparte delos que veis, quería poner otro tomando el sol, otro tirando bolas de nieve.... pero no me cabían!

Así que me quedé con el pingüino informático, el pingüino guitarrista (aficiones de uno de los cumpleañeros) y el pingüino que se daba un baño en su charco como el que está en Matalascañas.

Como Guille es intolerante a la lactosa, le hice las magdalenas de delante con yogur de soja (tengo que perfeccionar la receta para poder usarla en tartas fondant, de sabor está muy rica pero creo que no me aguantaría el peso con las proporciones originales) donde pondrán las velas para soplar. 

El resto de la tarta era de brownie de chocolate blanco relleno con una capa de relleno de vainilla y otra capa con un toquecito de frutos del bosque. 

Espero que os guste!